EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA

Un recorrido por doce manuales que se están utilizando este curso, permite descubrir que los programas y los objetivos oficiales amparan textos heterogéneos y hasta contradictorios.

Recordemos que hace dos años, con motivo de la nueva ley de educación, el Gobierno español consideró conveniente incluir en el plan de estudio de todos los escolares una materia que sirviera para formar “buenos ciudadanos”. La reacción fue inmediata por un sector de la población, contraria a que el Estado impusiera planteamientos morales a los alumnos. Lo que el Gobierno presenta como una ética de mínimos, es percibida de hecho por una ética de máximos que el Estado impone ignorando los derechos de las familias, los grupos religiosos, las comunidades culturales, ciudadanos….

Volviendo al principio: para muestra un botón. La “babel” ideológica de los libros de texto que ya están usándose

NO SER MEMO

No soy tan memo como para creerme que la llamada “moratoria del aborto”, aunque gane audiencia política, vaya a hacer desaparecer esta lacra mundial que, cada año, mata a cientos de millones de niños. Sin embargo albergo una secreta esperanza de que, con el paso de los años, esta cuestión de la defensa de la vida sea puesta en tela de juicio por las naciones, como de hecho ya se comienzan a barruntar ecos en Italia, España y los Estados Unidos de América.

El padre intelectual de esta moratoria es el periodista italiano Giuliano Ferrara, que ha anunciado su candidatura a las próximas elecciones generales en su país. Su propósito es defender la “batalla cultural”, porque es un hecho que los avances científicos evidencian la existencia de patrimonio genético humano en el embrión, un patrimonio único e irrepetible a partir de su primera etapa de desarrollo.

LOS PUNTALES DE SUECIA

Los jubilados se han convertido en Suecia en el puntal de la sociedad civil. Según un reciente estudio se ha podido verificar que los jubilados son los que más trabajos realizan como voluntarios.

No saco esta aseveración de la manga. Eva Jepppsson, del Departamento de Trabajo Social de la Universidad de Estocolmo, se centra en el periodo 1992-2005, mediante entrevistas a personas mayores de 60 años. Para ella es un error pensar que en nuestra sociedad del bienestar no se lleva ya el “ser servicial y tener la disposición de ayudar”.

Esta disposición se observa sobre todo en los jubilados, que tienen tiempo y ganas de hacer algo por los demás, ya sean familiares o no.

Sea bien recibido este hecho. Y no olvidemos que somos un país – desde el punto de vista demográfico – viejo. Resulta triste y gozoso a la vez que los mayores cumplan con una labor de puntal que corresponde a la generación de los adultos.

LOS QUE VAN A GANAR

Siempre he tenido la opinión, después de escuchar a expertos en el tema, de que una campaña política e, incluso, un debate o varios entre los distintos candidatos hacen cambiar el sentido del voto de una manera mínima.

Ahora nos encontramos ante las elecciones del 9.M. A este propósito he leído en una revista especializada algunas afirmaciones que me han llamado la atención. Por ejemplo: no cambian el voto, porque los ciudadano ven el debate con percepción selectiva y sólo ven lo que quieren ver. Aunque los expertos se cubren las espaldas diciendo: “las situaciones electorales más propicias a los debates son aquellas en las que los indecisos pueden determinar el resultado final”. O: “algunos autores piensan incluso que la interpretación que hace la prensa del debate, puede llegar a ser más determinante que el propio debate”.

En fin, en mi modesta opinión va a suceder algo parecido a lo que yo he conjeturado hace más de un año. No han sido necesarios los debates ni la campaña electoral. Zapatero ganará de nuevo por un escaso margen y se aliará con quien sea para lograr una cómoda legislatura: nacionalistas, IU...

Y creo también que la política de derechas, acomplejada, del PP ha sido un lastre que les ha impedido llegar al 9.M y “tocar pelo”.