CANELA FINA

Carlos E. Bilbao, 1949. Escritor. Me gusta la naturaleza; escribo sobre educación, sociedad, familia, política y literatura.

28 febrero 2006

YO ESTOY BIEN, TÚ ESTÁS MAL

La Psicología, entendida como la ciencia que observa y estudia el comportamiento humano, sus motivaciones, el funcionamiento de su mente, es una buena consejera para analizar el mundo que nos rodea que, en principio es todo el planeta, debido a las mejoras de la comunicación.
El calado metafísico y existencial de la Psicología es hondo. De ahí que muchas personas entiendan sus estructuras científicas, e incluso, se diga de ellas que “tienen mucha psicología”, porque saben analizar el comportamiento de los que les rodean, o cómo proponer un argumento o plan de trabajo, por ejemplo.
Los psicólogos llaman “proyección” a un concepto bien determinado; y es éste: una persona tiende, sin proponérselo conscientemente, a creer que la o las que tiene en frente y trata, piensan, reaccionan, tienen - deberían tener - los mismos gustos que ella. Unos ejemplos podrían ser: la figura paterna que machaca al hijo por no ir bien en sus estudios, porque él o ella fueron buenos estudiantes; el que no comprende que la otra persona pueda tener opiniones diversas en asuntos importantes (importante puede ser la política, pero también la moda o el fútbol); o un último ejemplo, el que tiene vergüenza ajena al ver hablar en público a un amigo: (él es tímido, pero su amigo no).
Normalmente hay cuatro posibilidades de reacción cuando juzgamos al otro (s). Por decirlo brevemente: “Yo estoy bien, tú estás bien. // Yo estoy bien, tú estás mal. // Yo estoy mal, tú estás bien. // Yo estoy mal, tú estás mal”. Estas cuatro formas de relación
deben analizarse y ver cuál sea la reacción dominante. Ninguna se da en estado puro y aislada de las otras: estaríamos ante un grave defecto de carácter.
Por tanto, ya sea en el ámbito familiar, escolar, social, sentimental, debe tenerse en cuenta este factor si queremos que las relaciones humanas sean eso: humanas.
Hay una derivación, que es la empatía. Pero de ella hablaré mañana.
Zimon de Elea

27 febrero 2006

PASEANDO POR LA CIUDAD (3)

Efectivamente, el haber conseguido un buena forma física - para hacer caminatas de dos horas, claro -, hace apetecible los paseos. Pero cuidado, estamos haciendo algo que al principo nos resultaba costoso; podemos volver a esa situación. ¿Qué hacer? Buscar compañía; primero podemos pensar qué amistades están en nuestra misma situación. Pero además nos daremos cuenta de que, en nuestro diario paseo, nos cruzamos con personas que están haciendo lo mismo. Hasta nos saludamos incluso y, como este deporte-medicina une mucho, acabaremos haciendo amistad con esos "colegas". Hay un no sé qué de franqueza, de confianza en el deporte, que derriba barreras que, en otra situación serían infranqueables. Surgirá entonces algo que sin lo cual no podríamos perseverar en el consejo médico: la compañía, la conversación.

Todavía nos quedan varios aspectos para considerarnos "profesionales": enfrentarse con la naturaleza (el campo); medir distancias y tiempos; el famoso podómetro... En definitiva, estamos a un paso del senderismo. ¡Ah!, ¿y qué medicen de un perro?

Zimon de Elea

24 febrero 2006

PENSANDO EN EL AMOR

Zygmunt Barman es uno de los sociólogos con más prestigio a nivel mundial. Pues bien, el pasado 2 de febrero se descolgó con una crítica a la nueva Encíclica de Benedicto XVI, “Deus caritas est”, en el periódico Avvenire en que, entre otras cosas decía: “Creo que el Papa ha dado en el blanco con su llamamiento al amor total en una sociedad que por definición evita los lazos duraderos y exclusivos”. Y todo eso respetando las libertades individuales. Argumenta en este sentido: “Cuanto más fáciles de romper son las relaciones, cuando se convierten en relaciones de usar y tirar, menos razones hay para combatir las dificultades que comporta cada cierto tiempo el seguir juntos”.
Declaraciones que hacen pensar, actividad ésta, poco cultivada seriamente.
Zimon de Elea

Yo no soy precisamente un fanático de la cosa religiosa, pero me preocupa la actitud de enfado, perplejidad e, incluso, escándalo en Occidente, ante la reacción de los musulmanes de todo el mundo por las tristemente célebres “viñetas de Mahoma”. Ofendidos, esgrimimos el derecho a la libertad de expresión información, o que ellos no sean precisamente un modelo a imitar… En el mejor de los casos, tratamos de arbitrar soluciones para que estas cosas no ocurran, los políticos piden perdón… Yo pienso que no van por ahí los tiros. En Occidente tenemos que saber que la ofensa religiosa a los sentimientos de otras culturas puede ser considerada – lo es en el caso de la religión musulmana – como una blasfemia, un insulto directo a Dios, y reaccionan con la cultura de la vida y las pautas religiosas que profesan.
Todo lo contrario ocurre en nuestro entorno, donde la blasfemia, irreverencia, ataques a las iglesias cristianas – sobre todo a la Católica -, insultos a personas físicas o entidades, son admitidas socialmente, cuando podrían ser motivo de querella. ¿O no?
Zimon de Elea

21 febrero 2006

"ARENA POLÍTICA"

Con estas dos palabra: "ARENA POLÍTICA", justifican los políticos las una y mil tarascadas que se dan en una defensa "democrática", eso sí, de sus posiciones ideológicas y acontecimientos del día a día. Luego -dicen- mantienen una relación cordial. ¡Qué embuste! En sus caras, palabras y gestos se puede percibir la intransigencia sectaria, el fanatismo.
Me resulta patético ver a "los padres de la patria" ponerse la zancadilla. Hay que cuidar la imagen -piensan y dicen-, porque hemos de seguir engatusando a los ciudadanos para no perder votos. Y olvidan que la imagen es el reflejo de una realidad; de lo contrario, se convierte en una caricatura, en una mentira.
Tenemos una democracia bochornosa, cosida y recosida a base de mentiras.
Zimon de Elea

09 febrero 2006

BENEDICTO XVI HABLA DEL AMOR

Acostumbro a hacer “zaping” con la radio, buscando la verdad. Es una tarea muy difícil, se lo advierto; sobretodo si se cuenta con poco tiempo. Un buen periodista de Punto Radio - Felix Madero - se admiraba de que el Papa hablara (escribiera, porque se trata de una Encíclica) del amor en todas sus acepciones: desde el eros hasta el amor de unión con Dios, razonándolo con esa gracia, clarividencia, lógica demoledora que tiene el actual Papa.
Y se admiraba nuestro periodista (en tono positivo se felicitaba) de que “las cosas” fueran evolucionando: novedades sobre el sexo y tal... Ya se imaginan.
Yo sólo les remito al libro más antiguo de la Biblia: EL GÉNESIS, en su capítulo 2: “Se unirán el hombre y la mujer, y formarán los dos una sola carne”. No se puede ser más claro, teniendo en cuenta además, que frases similares salen tanto en el Antiguo como Nuevo Testamento.
Me ha gustado esta breve encíclica de Benedicto XVI; se la recomiendo. No llega a los tres euros, aunque también ha sido publicada en muchos medios de prensa escrita.
Zimon de Elea

LA LEY ANTITABACO EN ESPAÑA

Esta expresión: antitabaco, me parece adecuada. En la época de esa especie de revolución mundial juvenil que fue “mayo de 1968”, se puso de moda una frase muy cierta y, por tanto, sin poder ser rebatida así como así: “tu libertad termina donde comienza la de los demás”. Yo soy fumador, y me gustaría no serlo; no puedo. Pero es evidente que “lo” del “fumador pasivo” es una verdad como un templo. También es evidente que la Sanidad podría ahorrarse muchos millones de euros, si no tuviese tantos casos de cáncer de pulmón, enfermedades cardiovasculares, respiratorias...: no seamos hipócritas.
“Endurecer la ley si es preciso”, dice la ministra; bueno, pero que sepa esa señora que una costumbre tan arraigada no se extirpa con una serie de leyes; hay que dar tiempo al tiempo. Quizá el siglo XXII sea una buena meta, para no caer en un Estado policial.
Zimon de Elea

02 febrero 2006

CONSEJOS MEDICOS SOBRE PASEOS (2)

Sigamos con mis experiencias sobre caminatas, que tan necesarias son para la salud. Efectivamente, no hay nada como estar físicamente en forma, para que le cojamos el gusto a este humilde deporte. Entonces - pongamos el ejemplo del paseo urbano - caminar por la ciudad será una distracción; no estaremos pendientes de nuestro cuerpo fatigado y veremos con orgullo que estamos sudando, que es extraordinario para luchar contra el Colesterol. Veremos edificios, casas, puentes, obras en constrcción... de distinta manera. Nos alegraremos de su belleza, o nos enfadaremos porque el Ayuntamiento ha permitido cortar el tráfico en una calle, a la cual están destrozando. En fin, haremos auténticas visitas de obras. Y al final, ya cansados y sorprendidos de que haya pasado tan rapidamente el tiempo, nos permitiremos el lujo de sentarnos unos minutos al sol en un parque, o banco de una calle -si hace buen tiempo, claro-, y fumarnos un pitillo. O también entrar en una cafetería y tomarnos un descafeinado con leche desnatada, por supuesto. Pero lo mejor es ir pertrechado con algo. De eso hablaremos otro día.
Zimon de Elea